En el norte de Taiwán, esta aldea futurista fue construida inicialmente como un retiro de vacaciones de lujo para los ricos. Sin embargo, después de numerosos accidentes mortales durante la construcción, la producción se detuvo. Una combinación de falta de dinero y la falta de voluntad hizo que el trabajo se detuviera definitivamente, y el extraterrestre como las estructuras siguen siendo como en recuerdo de las víctimas. De hecho, los rumores en los alrededores indican que la ciudad es ahora perseguido por los fantasmas de quienes murieron.
El proyecto nunca podrá ser reiniciado gracias a la creciente leyenda, y no habría ningún valor en el re-desarrollo de la zona para otros fines. Tal vez simplemente porque la destrucción de casas de los espíritus solo es algo malo que hacer.
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